El alcalde de Alcalá de Henares, Javier Rodríguez Palacios, y el concejal presidente de la Junta Municipal del Distrito V, Alberto González Reyes, han presentado hoy en rueda de prensa las obras del proyecto de reorganización del flujo vehicular y zonas adyacentes en la intersección de la Avenida Lope de Figueroa con las calles Santander y Luis de Madrona.
El alcalde complutense ha afirmado que “con esta actuación cumplimos un compromiso con los vecinos y vecinas de este barrio. Reformamos uno de los pocos cruces que quedan del pasado, que estaba a la espera de la aprobación por parte de la Comunidad de Madrid del proyecto, que se presentó al Plan de Inversión Regional”.
“Además de la mejora del tráfico, habrá una remodelación importante en las zonas adyacentes, que incluirá una reorganización del aparcamiento creando nuevas plazas en superficie, gratuitas para los vecinos y vecinas”, ha manifestado Rodríguez Palacios.
Por último, el alcalde ha afirmado que “esta rotonda se dedicará a los funcionarios de prisiones, por la vinculación de nuestra ciudad con las Instituciones Penitenciarias. Los trabajadores penitenciarios merecen este homenaje y pasar a formar parte del callejero de Alcalá de Henares”.
El concejal-presidente del Distrito V, Alberto González, ha manifestado que “presentamos los detalles de las obras de reorganización y mejora del tráfico en la intersección de la Avenida Lope de Figueroa y las calles Santander y Luis de Madrona. Se trata de una zona que presenta en su entorno varios edificios docentes, asistenciales y comerciales lo que le confiere un carácter de arteria receptora de tráfico continuo”.
El presupuesto de la actuación asciende a 446.278,73€ (IVA incluido), en el marco del Programa de Inversión Regional de la Comunidad de Madrid 2016-2019. Las obras, que ya han comenzado, tienen una duración estimada de 3 meses.
La calle Santander conecta la zona con el Colegio Concertado Ana Pellegrini (antiguo Colegio San Joaquín y Santa Ana) y el Centro Comercial el Val lo que le confiere un carácter de vía distribuidora y receptora de flujos de tráfico en horarios conflictivos escolares y horario comercial. Además, la calle Luis de Madrona es una vía de tráfico local residencial con comercios en planta baja y que da acceso al Colegio Miguel Hernández, receptora de un tráfico similar a la anterior.
En la actualidad nos encontramos la intersección regulada por semáforos. Estas son calles con un tráfico moderado y todas cuentan con pasos de peatones y semaforización para su regulación. Sin embargo, el funcionamiento de la intersección presenta dificultades en horas punta.
El objeto de la actuación a realizar es mejorar la circulación de peatones, ciclistas y de vehículos a motor en el entorno descrito, aumentando la fluidez de circulación lo que se transformará en una reducción de las emisiones de CO2 al reducir tiempos de espera.
Esto se va a conseguir gracias a la ejecución de una “turborotonda”. El funcionamiento de esta nueva infraestructura será muy intuitivo, siendo una alternativa más segura y eficiente sobre la rotonda convencional. Tendrá dos carriles por cada ramal de entrada, carriles interiores en forma de espiral y carriles separados para eliminar la necesidad de invadir el carril adyacente.
El funcionamiento implica que los conductores tienen que elegir un carril antes de entrar a la rotonda, con la finalidad de salir a la dirección deseada. Esto permite una mayor capacidad de vehículos en la rotonda sin comprometer la seguridad y sin la necesidad de espacio adicional. Existirá un separador de carriles (materializado con resaltes), para evitar cambios de carril y entrecruzamientos, lo que implicará una menor velocidad al conducir dentro de la rotonda.
Al no estar enfrentadas las calles Santander y Luis de Madrona, sino que están desfasadas, la forma geométrica final de la rotonda se acerca más a una elipse que a una circunferencia. El flujo de mayor demanda vehicular es el factor más importante que influye en el diseño de la misma.
Este tipo de rotonda tienen la ventaja de que la entrada a la rotonda es más segura, pues los conductores sólo tienen que ceder el paso, además el riesgo de accidentes debido a los cambios de carril es menor.
El interior de la rotonda llevará una escultura relacionada con los sólidos platónicos, que representa la armonía y la perfección.